La tendencia es imparable. El consumidor está echando la vista atrás con nostalgia, recordando las comidas en casa de la abuela y los productos tradicionales que se compraban en el mercado. Antaño, no había tanta variedad y nos veíamos obligados a consumir alimentos de temporada. Con el frío, en el norte, llegaban las castañas: era la época de tomar un buen tazón de leche con castañas. Las firmas lácteas no quieren dar la espalda a esta nostalgia: todo lo contrario, quieren satisfacer los anhelos de los consumidores.
La firma láctea preferida por los gallegos no es otra sino leche larsa, un clásico en la región. Ha conseguido su estatus gracias a, entre otras cosas, estar en contacto con las peculiaridades locales sabiendo adaptar tanto sus productos como sus estrategias de marketing al mercado en el que más éxito tiene. Es así como surgen productos innovadores, pero a la vez tradicionales que crean un vínculo como el pasado más entrañable de la región.
¿Por qué no envasar un alimento tan querido como la leche con castañas? Aprovechando el hecho de que Larsa es una de las firmas pioneras en el sector de la leche de pastoreo, la empresa gallega ha creado una línea de productos denominada “antojos larseiros” que tiene en la leche con castañas su primer representante.
La idea, en realidad, parte de un concurso en el que interviene tanto la propia leche larsa como la Universidad de Santiago de Compostela que premia a emprendedores en el ámbito de la innovación en alimentación saludable. El primer premio de esta convocatoria se lo llevó un ingeniero que propuso la leche con castañas.
Desde luego, como decimos, no se trata de una receta innovadora, la innovación está en el proceso de comercializar una receta tan tradicional respetando sus valores originales. La leche con castañas de Larsa se enorgullece de usar para su composición la leche de pastoreo de la propia firma así como castañas 100% gallegas.
El consumidor más nostálgico y que apueste por productos naturales está de suerte. Como vemos, cada vez son más las empresas que tienen en cuenta sus deseos.